Había visitado Cartagena varias veces, pero nunca una ruta gastronómica había sido el motivo principal de mi viaje. El pasado 27 de septiembre, Sobremesa fue invitado como medio de comunicación por el Grupo Empresarial Llamas Arenas a un tour gastronómico para vivir la experiencia que brindan en cada uno de sus seis restaurantes de la ciudad.
Complacidos, aceptamos la invitación y viajamos a Cartagena expectantes acerca de la forma como un grupo de empresarios nos invitaría a conocer la cultura gastronómica de su ciudad. Al llegar a Cartagena, nos recibió en el aeropuerto Gabi Arenas, una de las creadoras del grupo GELA, quien alegremente nos dio la bienvenida y nos acompañó a nuestra primera parada del tour. Entonces llegamos a Candé, un restaurante cuya promesa de valor es la de vender comida 100% cartagenera y ciertamente desde la puerta de este establecimiento, se respira el aroma del sazón caribeño y con la música se impregna en el cuerpo el sentir del folclore de la región.
Luego, sentados en la mesa, Gabi Arenas se tomó la palabra para explicarnos el menú que nos habían preparado para recibirnos. Al escuchar la descripción de los platos, me llevé una grata sorpresa, pues algunos de ellos eran netamente tradicionales y no tan comerciales. Ese era el caso de la sopa de higadete, una preparación a base de hígado de res y plátano maduro que le aporta un dulzor particular. Este, a pesar de ser un plato de amores y odios, fue el elegido por Gabi para darnos la bienvenida, pues es un ícono de los fogones cartageneros de antaño cuya presencia en las nuevas generaciones se ha ido desdibujando. Más que el plato, lo que me llamó la atención fue la pasión de este grupo de empresarios por rescatar, defender y enaltecer la cultura del caribe incluso jugándosela con esta particular preparación ante la opinión pública.
Luego llegaron los demás platos; un arroz de jaiba, también dulce; una picada con butifarra con carimañolas, suero costeño y bollos; un jugo de corozo y para finalizar; un helado de Cola Román con galletas de soda. De Candé me fui complacida, pues además de haber confirmado que su consigna de comida 100% cartagenera sí se cumplía, me quedaba con la gran satisfacción de ver el esfuerzo que están haciendo empresarios como los del grupo GELA por impulsar el turismo otorgándole valor a la gastronomía local.
Nuestro tour continúo y nos dirigimos a Buena Vida, Marisquería Caribeña y Rooftop, un lugar que al entrar te deja sorprendido por la belleza de su diseño moderno y tropical. Subimos al tercer piso y en la terraza nos esperaban con un refrescante coctel y buñuelos de caracol para ver el atardecer cartagenero en pleno centro histórico. La carta de este restaurante está inspirada en las Costas del Mar Caribe y las recetas cartageneras que presentan son elaboradas con ingredientes locales como el toyo (un tipo de tiburón pequeño), la jaiba y maíz.
Al finalizar el día, nos invitaron a dar un paseo en un bote de lujo por la bahía, pues una de las líneas de negocio de este grupo empresarial es Boating Cartagena, empresa con la que se dedican al alquiler de yates y lanchas para visitar islas del Rosario y Barú. Como era de esperarse la comida a bordo, era de uno de sus restaurantes llamado Se volvió Prisprí un coffee shop ubicado en la esquina del parque de Bolívar en la ciudad amurallada. Mientras hacíamos el recorrido degustando unos sánduches de salmón, nos explicaban que el nombre de este restaurante se debía a una expresión cartagenera que se utiliza para referirse a alguien que subió de estatus social. En este caso, le llamaban así al lugar porque antes de ser adquirido por GELA era un local abandonado y ahora goza de un aspecto vintage y encantador. Al día siguiente durante nuestro desayuno pudimos conocer este lugar, que a pesar de que se había vuelto prisprí, ofrecía una carta con precios justos y cómodos para cualquier turista. Las opciones para comer en este restaurante van desde desayunos durante todo el día hasta almuerzos y antojos de dulce y de sal.
Finalizando nuestro tour visitamos Pezetarian, un restaurante inspirado en el pescetarianismo, dieta que se basa en alimentos de origen vegetal como frutas, verduras y legumbres combinadas con pescados y mariscos. Este lugar, en el 2018 resultó ganador en Premios La Barra como mejor Restaurante Casual Región Caribe y la verdad es que al conocer su propuesta y probar sus platos es fácil darse cuenta de por qué. Ha sido tanto el éxito que se han expandido a Medellín y tienen planes de llegar a Bogotá, algo que espero ansiosamente.
Nuestra última parada fue en El Burlador Gastrobar y Steakhouse, un restaurante español fundado hace 22 años cuya oferta son jamones, tapas y paellas en un ambiente elegante y acogedor pero accesible para los turistas. Uno de sus mayores atractivos son los shows de flamenco y de rumba que sumergen al comensal en la experiencia de la gastronomía española.
Sin duda, este tour gastronómico fue un festín para el paladar que nos dejó un buen sabor, pues tranquiliza ver que los empresarios, quienes son el motor del desarrollo de Cartagena, están haciendo el esfuerzo por fijar la mirada hacia lo local y posicionar al país como un destino gastronómico.
Estos son algunos momentos del tour gastronómico
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