De acuerdo con el departamento de Planeación Nacional, actualmente en Colombia se desperdician más de 9. 76 millones de toneladas de alimentos al año, el 20.6% de este desperdicio viene del sector retail, en el que se incluyen los restaurantes y establecimientos de comida.
Esta ha sido una problemática preocupante en el país, no solo por impacto ambiental que genera sino también porque contrasta con otra cifra desoladora: según el Programa Mundial de Alimentos, más de 10 millones de habitantes en Colombia tienen un consumo insuficiente de alimentos.
Muchos emprendimientos alrededor del mundo han buscado crear mecanismos y soluciones que ayuden a disminuir la cantidad de alimentos que desperdician. Nuestro país no ha sido ajeno y hace algunas semanas, un colombiano junto a sus dos socios latinoamericanos, lanzaron “Oliver” una aplicación cuyo objetivo es acabar con esta problemática.
“Oliver” funciona como una aplicación de delivery tradicional en la que, de acuerdo a la ubicación del usuario, le salen los establecimientos a los que puede pedir comida. Lo que la hace especial es que en esta plataforma los restaurantes suben los platos excedentes que les han quedado en su jornada con descuentos que van desde el 30 hasta el 75%.
Este proyecto nació como parte de la tesis de grado de tres estudiantes de Colombia, Perú y Argentina para un MBA en Madrid en 2019. Manuel Oliva, CEO y cofundador de Oliver, cuenta que comenzaron a investigar cómo contribuir a la problemática de medio ambiente que sufre el mundo y “encontramos un dolor muy grande cuando recordamos el dolor que nos da botar comida que por alguna razón no la podemos consumir. En ese momento, pensamos en cómo sería esa situación para los restaurantes ”.
Además, asegura que esta “es una aplicación pensada para generar un triple impacto: primero, brindarle beneficios a los restaurantes porque pueden vender sus productos, segundo, ayudar al consumidor final pues puede encontrar una oferta de comida económica y tercero, al ecosistema, debido a que la aplicación busca tener un impacto positivo con el medio ambiente al reducir el desperdicio”.
La idea es que el restaurante ponga en la aplicación un producto fresco y de alta calidad que a mediados o finales del día no ha podido vender, por eso, la compañía tiene estrictos protocolos para garantizar el buen estado de los alimentos que se comercializan por medio de la aplicación.
“Somos más que una plataforma de descuentos, esta plataforma quiere aportar a una problemática ambiental” puntualiza Oliva.
En la actualidad, Oliver tiene 23 restaurantes dentro de su plataforma y opera en Bogotá. Su cofundador espera en los próximos meses llegar a más ciudades del país e incluso expandirse internacionalmente.
Los restaurantes interesados en vender sus productos en la plataforma pueden ingresar a su página web y quienes quieran descargar la aplicación pueden hacerlo desde la playstore para Android y Apple Store para iOS.