Raúl López junto a su esposa Dayana, fundaron La Machelería Steakhouse, un restaurante que tiene como objetivo llevarle a sus comensales una experiencia enriquecedora alrededor de las carnes premium como lo son la punta de anca, el T-Bone, el Tomahawk, el New York o el Cowboy.
Comenzaron esta aventura con su planta de maduración en el barrio 7 de agosto de Bogotá donde trabajan como proveedores. Sin embargo, vieron una oportunidad de llegarle al consumidor final con esta propuesta en la Calle 109 # 18b – 32.
La maduración en seco que tienen algunos de sus cortes se basa en el añejamiento controlado de la carne. Desde el sacrificio del animal, el producto es dispuesto en cuartos fríos en un frigorífico donde la humedad y temperatura de los cuartos es controlada. Allí, la carne se empieza a quemar y a descomponer las enzimas y el colágeno; haciendo que la carne se vuelva tierna y realce el sabor de los cortes. Este es el plus que le dan a su propuesta. Por ejemplo: Los cortes con hueso tienen 18 días de maduración en seco, mientras que a los bifes se le brinda una maduración al vacío.
Para obtener esta carne de talla internacional y con gran calidad, cuentan con alianzas con ganaderos de la dorada y el llano, a la vez que manejan su propia finca. Por lo que su carne es 100% colombiana, apoyando al mercado nacional. “Existe un mito de que la única carne buena es la importada, pero en el mercado nacional también se maneja productos de buena calidad. Por eso, nuestra promesa de valor son los cortes exclusivamente nacionales al mejor precio. Manejamos una buena relación calidad-precio”, establece Dayana.
Además, esta experiencia la enriquecen también con cervezas importadas como la Delirium y acompañamientos como la piña aromatizada, la arepa de peto y queso o las papas nativas que traen de Boyacá; los cuales conforman una mezcla perfecta para el paladar.
La Machelería quiere consolidarse como el mejor steakhouse de Bogotá y esperan poder franquiciarse a futuro. Sin embargo, consideran que el mismo mercado les va avisar hacia donde dirigir su empresa. Por el momento, quieren consolidar este restaurante y que la gente los conozca como una buena opción para los amantes de la carne.
También, porque les enseñan a sus comensales sobre el tipo de carne, tips, cortes, términos y calidad. Siempre buscan sugerirle al cliente la manera en la que mejor puede disfrutar la jugosidad y terneza del producto. Para ello, la capacitación es fundamental a la hora de gestionar a su personal y de asesorar al cliente que cada día es más exigente y conocedor de este mundo de las carnes.
Para conocer más sobre su propuesta gastronómica ingresen al siguiente link: https://lamacheleriasteakhouse.com/
EL COWBOY: UN CORTE QUE ENAMORA
Para todos los amantes de los buenos cortes de carne madurada, El Cowboy, también conocido como Chuletón, es un corte que enamora gracias a su mezcla perfecta entre hueso, carne, grasa, terneza, su sabor enamora y lo hace un digno representante de los mejores cortes parrilla.
El Cowboy se compone del ribeye y de la costilla delantera de la res, su exquisito sabor se lo otorga la costilla y la grasa entreverada del lomo ancho. Expertos de La Macheleria Steakhouse realizan un proceso de maduración en seco, esta técnica de añejamiento de la carne en donde el colágeno se descompone, potencian su sabor y terneza. Lo ideal es disfrutar de este amado Cowboy en 500grs, un corte grueso, jugoso, tierno y de muchísimo sabor.
Su nombre se debe a los cortes que hacían los cowboys (vaqueros) en sus ranchos de Estados Unidos, y es uno de los más apetecidos por los conocedores de la buena carne parrillada.
Ahora, si hablamos de la pareja perfecta, te recomendamos probar el Cowboy junto con una Delirium Tremens, una cerveza belga que ha sido catalogada dos veces como la mejor cerveza del mundo, sus notas cítricas son ideales para refrescar el paladar después de la potencia del Cowboy.
Sin duda alguna, el amor existe y es perfecto para compartir y recomendar entre los cortes madurados de La Macheleria Steakhouse.
